Desde comienzos de 2023, el proyecto SolarMoves ha estado investigando hasta qué punto la difusión de la energía fotovoltaica integrada en vehículos afectaría a la demanda de electricidad de una flota de vehículos eléctricos (VE). Para ello, varias furgonetas y camiones con energía fotovoltaica integrada estarán equipados durante un año con sensores para medir y determinar la radiación solar en condiciones reales en toda Europa. El proyecto de investigación se extenderá hasta finales de 2026.
La Dirección General de Movilidad y Transportes (DG Move) de la Comisión Europea encargó el proyecto SolarMoves para evaluar el impacto de la energía solar a bordo en la demanda de infraestructuras de carga eléctrica en la Unión Europea. Ahora, como parte del proyecto, algunas flotas de camiones que viajan por Europa han sido equipadas con sensores para validar el modelo de rendimiento eléctrico de la investigación con datos del mundo real.
Los resultados de esta recopilación de datos durante un año proporcionarán información detallada sobre el aumento de la eficiencia de los vehículos eléctricos a través de la energía fotovoltaica integrada. El objetivo es determinar el potencial global de la energía fotovoltaica integrada en el vehículo y, en un escenario en el que una proporción significativa de vehículos eléctricos estará equipada con módulos solares en los próximos años, hacer predicciones sobre la infraestructura de carga eléctrica necesaria.
El consorcio del proyecto SolarMoves está formado por el Instituto de Investigación Aplicada TNO de Países Bajos, el Instituto Fraunhofer de Sistemas de Energía Solar (ISE) de Alemania y los proveedores de equipos de tecnología solar para vehículos Sono Motors, Lightyear Layer e IM Efficiency. Los camiones son propiedad de varias empresas de logística que apoyarán al proyecto como parte de sus actividades.
Proyecto PV2GO
De 2019 a 2023, Fraunhofer ISE ya investigó el potencial solar de las rutas de transporte alemanas en el proyecto PV2GO. Con los sensores de irradiación solar que ahora se han desarrollado para SolarMoves, se pudo adquirir una primera experiencia en este proyecto. Los sensores se colocaron en 57 automóviles particulares y cinco camiones de una empresa de logística.
Durante las mediciones, los científicos recopilaron y evaluaron más de 46 millones de puntos de datos a lo largo de una distancia de más de 460.000 kilómetros. Llegaron a la conclusión de que la pérdida de energía solar es de alrededor del 35% teniendo en cuenta la sombra en un vehículo con energía fotovoltaica integrada en el techo y el capó, y un comportamiento de conducción medio.
Según los cálculos de Fraunhofer ISE, los turismos con energía fotovoltaica integrada producirían alrededor de 460 kWh de electricidad al año, teniendo en cuenta estas pérdidas. Con un consumo de 15 kWh cada 100 kilómetros, un coche eléctrico ganaría unos 3.000 kilómetros de autonomía al año. En el proyecto SolarMoves, el consorcio averiguará hasta qué punto los resultados de Alemania pueden transferirse al conjunto de la UE.