El Ayuntamiento de Calatayud aprobó el pasado año un total de 32 licencias para la instalación de paneles solares en las cubiertas de diversos inmuebles de la ciudad. La inversión para estas actuaciones suma 1.723.403,64 euros y fueron realizadas tanto en el sector residencial como en el sector industrial. Además, el consistorio ha introducido modificaciones en la ordenanza municipal para facilitar la incorporación de paneles fotovoltaicos en el casco antiguo de la ciudad.
En este tipo de intervenciones, el impuesto municipal de construcciones instalaciones y obras (ICIO) está bonificado hasta un 80%, lo que ha favorecido la iniciativa de realizar instalaciones solares en la localidad. Además, se han convocado diferentes líneas de ayudas del Ayuntamiento de Calatayud, el Gobierno de Aragón y el Gobierno de España, para las actuaciones de regeneración y renovación urbana destinadas a apoyar la transición energética.
Las bases de la última de estas convocatorias de ayudas se aprobaron en este mes de enero, y se destinarán 500.000 euros provenientes de los Fondos NextGenerationUE a edificios de uso residencial, viviendas y locales de varias zonas de la ciudad en los que se realicen obras que alcancen un ahorro energético de al menos un 30%.
Modificación de la ordenanza para impulsar la energía solar
La colocación de placas solares no es posible en todas las zonas puesto que la Patrimonio Cultural Aragonés impone limitaciones en el casco antiguo de las ciudades. Además, en el caso de Calatayud, su casco antiguo es el más extenso de Aragón.
Con el fin de avanzar en la transición energética de forma respetuosa con el patrimonio en todo el casco antiguo, el ayuntamiento ha introducido cambios en la ordenanza reguladora de estética de edificaciones y espacios visibles desde la vía pública. Esta modificación afectará a la zona comprendida entre los viales de la Avenida de San Juan el Real, la Plaza de Costa y la zona del Paseo Cortes de Aragón.
Los cambios fijan unos criterios urbanísticos básicos para que en este perímetro puedan instalarse placas solares reduciendo su impacto visual. Si se comprueba que el objetivo se cumple, y que las placas solares colocadas en esta parte de la ciudad no tienen impacto estético y visual, o que es mínimo, la medida podría ampliarse a otras zonas en las que se localizan la mayoría de los monumentos, y bienes catalogados y protegidos.
La ordenanza recoge, entre otras obligaciones, que los paneles fotovoltaicos estén en espacios secundarios o en la cubierta del edificio que sea menos visible tanto desde la calle, como desde las zonas más próximas y las más altas. Además tendrán que integrarse en la morfología del edificio. De esta modificación inicial se va a dar cuenta a la Comisión Provincial de Patrimonio y al Consejo de Urbanismo para atender sus posibles sugerencias. Antes de su entrada en vigor tendrá que publicarse en el Boletín Oficial de la Provincia.