Según datos de la Oficina Europea de Estadística (Eurostat), la cuota de las fuentes renovables en el consumo final de energía en la UE alcanzó el 23% en 2022. En comparación con 2021 esto representa un aumento de 1,1 puntos porcentuales. Si bien la energía eólica e hidroeléctrica encabezan la lista de energías renovables, la energía solar es la fuente renovable de más rápido crecimiento, pasando de solo 7,4 TWh en 2008 a 210,3 TWh en 2022. En cuanto al consumo de electricidad generada a partir de fuentes renovables, durante 2012-2022 se refleja en gran medida una expansión de la energía eólica y la energía solar. En 2022, las fuentes de energía renovables representaron el 41,2% del consumo bruto de electricidad en la UE, casi 4 puntos porcentuales más que el año anterior.
La energía eólica e hidroeléctrica representaron más de dos tercios del total de la electricidad generada a partir de fuentes renovables con 37,5 y 29,9%, respectivamente. El tercio restante de la electricidad generada procedía de energía solar (18,2%), biocombustibles sólidos (6,9%) y otras fuentes renovables (7,5%).
Suecia lidera el consumo de energías renovables entre los países miembros de la UE, con casi dos tercios (66%) de su consumo final, destacando principalmente la energía hidroeléctrica, eólica, de biocombustibles sólidos y líquidos, y bombas de calor. Le siguió Finlandia con un 47,9%, que también depende de la energía hidroeléctrica, eólica y de los biocombustibles sólidos, por delante de Letonia con un 43,3%, que dependió principalmente de la energía hidroeléctrica.
Tanto Dinamarca (41,6%) como Estonia (38,5%) obtuvieron la mayor parte de las energías renovables de la energía eólica y los biocombustibles sólidos. Portugal (34,7%) se basó en biocombustibles sólidos, eólicos, hidroeléctricos y bombas de calor, mientras que Austria (33,8%) utilizó principalmente biocombustibles hidroeléctricos y sólidos.
Las proporciones más bajas de energías renovables se registraron en Irlanda (13,1%), Malta (13,4%), Bélgica (13,8%) y Luxemburgo (14,4%). En total, 17 de los 27 miembros de la UE registraron porcentajes inferiores a la media de la UE del 23% en 2022.
Aumento en el objetivo europeo de energías renovables en 2030
La Directiva sobre fuentes de energía renovables revisada ha modificado al alza el objetivo de energía renovable de la UE para 2030 del 32% al 42,5%. Por lo tanto, los países de la UE deberán intensificar sus esfuerzos para cumplir conjuntamente con el nuevo objetivo de la UE para 2030, que requiere aumentar la cuota de fuentes de energía renovables en el consumo final bruto de energía de la UE en casi 20 puntos porcentuales.
Convertirse en el primer continente climáticamente neutro del mundo de aquí a 2050 es el objetivo del Pacto Verde Europeo. El uso de energías renovables tiene muchos beneficios potenciales, incluida la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero, la diversificación del suministro de energía y una menor dependencia de los mercados de combustibles fósiles. El crecimiento de las fuentes de energía renovables también puede estimular el empleo en la UE, a través de la creación de puestos de trabajo en nuevas tecnologías verdes.