La 28ª Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP28), celebrada en Dubái del 30 de noviembre al 12 de diciembre, concluyó ayer con un acuerdo sin precedentes de 198 partes para alcanzar una nueva era de acción climática. Las partes alcanzaron un acuerdo histórico mediante la firma de ‘El Consenso de los EAU’, un texto que insta a los países a iniciar la transición para abandonar los combustibles fósiles para alcanzar el cero neto en 2050, e incluye un nuevo objetivo específico para triplicar las energías renovables para 2030, entre otras medidas.
Tras un año de compromisos diplomáticos y dos semanas de intensas negociaciones, el Consenso de los EAU refleja el objetivo de la Presidencia de la COP28 de brindar la respuesta más ambiciosa posible al Balance Global y cumple con los objetivos centrales del Acuerdo de París.
Los principales compromisos contenidos en este texto negociado en materia de energías renovables incluyen una referencia a la transición hacia el abandono de todos los combustibles fósiles para permitir alcanzar el cero neto para 2050, y un nuevo objetivo específico para triplicar las energías renovables y duplicar la eficiencia energética de aquí a 2030.
Además, se insta a acelerar los esfuerzos hacia la eliminación gradual de la energía a base de carbón, la eliminación progresiva de subsidios ineficientes a los combustibles fósiles, y otras medidas que impulsen la transición para dejar atrás los combustibles fósiles en los sistemas energéticos, de manera justa, ordenada y equitativa.
Los compromisos alcanzados también se basan en aumentar las expectativas para la próxima ronda de Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC) al alentar objetivos de reducción de emisiones para toda la economía; generar impulso detrás de la agenda de reforma de la arquitectura financiera, reconociendo el papel de las agencias de calificación crediticia por primera vez y pidiendo una ampliación del financiamiento en condiciones concesionales y de donaciones; y reconocer la necesidad de aumentar significativamente el financiamiento para la adaptación más allá de la duplicación para satisfacer las necesidades urgentes y cambiantes.
Por otro lado, el texto busca generar impulso detrás de la agenda de reforma de la arquitectura financiera, reconociendo por primera vez el papel de las agencias de calificación crediticia y solicitando una ampliación del financiamiento en condiciones concesionales y de donaciones. Por último, se reconoce la necesidad de aumentar significativamente la financiación para la adaptación, más allá de duplicarse, para satisfacer las necesidades más urgentes en materia de acción climática.
Principales logros de la Agenda de Acción de la COP28
Para alcanzar objetivos más allá del Consenso de los EAU, la Presidencia de la COP28 ha tomado medidas a lo largo de este año a través de su Agenda de Acción. Esta línea de ruta abarca cuatro pilares fundamentales: acelerar una transición energética justa y ordenada; arreglar el financiamiento climático para hacerlo más disponible, asequible y accesible; centrarse en las personas, la naturaleza, las vidas y los medios de subsistencia; y fomentar la plena inclusión en la acción climática.
Los principales logros de la Agenda de Acción incluyen el Compromiso Global de Energías Renovables y Eficiencia Energética de triplicar la capacidad de generación de energía renovable instalada en todo el mundo a al menos 11.000 GW, y duplicar la tasa promedio anual global de mejoras de eficiencia energética a más del 4% para 2030. Este compromiso ha sido respaldado por 132 países.
También se incluye en la Agenda el Acelerador de Descarbonización Global una serie de iniciativas energéticas históricas para acelerar la transición energética. La iniciativa más importante dentro de este apartado es el Compromiso Global de Energías Renovables y Eficiencia Energética, lo que ha sido respaldado por 132 países. Y se incluye la Carta de Descarbonización del Petróleo y el Gas (OGDC), que compromete a los signatarios a cero emisiones de metano y a poner fin a la quema rutinaria para 2030, y a operaciones netas cero a más tardar en 2050. Hasta la fecha, se han adherido a él 52 empresas, que representan más del 40% de la producción mundial de petróleo.
La Presidencia de la COP28 ha sido clara en su intención de garantizar que los acuerdos alcanzados en la COP28 se cumplan, con mecanismos para rastrear el progreso en comparación con la implementación. La Presidencia ya ha firmado un acuerdo con Brasil, el país que acogerá la COP30, para profundizar la colaboración y aumentar las ambiciones climáticas para la COP30.