La Diputación de Barcelona destinará 1,3 millones de euros para crear nuevas comunidades energéticas en la provincia y lo hará a través de la nueva Oficina de Impulso de Comunidades Energéticas de la Diputación de Barcelona, un servicio que acompañará a los entes locales de la provincia en todo el proceso de creación de nuevas comunidades. El proyecto planea el asesoramiento a un centenar de centros educativos de la provincia y un catálogo de talleres, recursos, seminarios técnicos y cursos de formación.
La nueva oficina informará a los ayuntamientos sobre las ayudas económicas disponibles, les apoyará en la presentación de solicitudes y les asesorará en la redacción de ordenanzas.
También facilitará a los entes locales recursos informativos y formativos para que los vecinos conozcan qué son las comunidades energéticas, el beneficio local que conllevan y el papel de la ciudadanía en la transición hacia la descarbonización energética.
Las comunidades energéticas, una de las columnas vertebrales de la transición energética
La previsión es que con este programa, que se desarrollará hasta septiembre de 2025, se realicen 1.400 acciones de asesoría a los entes locales, se creen una cincuentena de comunidades energéticas y se apoye, de forma indirecta, a 450.000 habitantes de la provincia.
El proyecto parte de la base de la ciudadanía como elemento central de la transformación energética. Según sus creadores, las comunidades energéticas deben ser una de las columnas vertebrales de la transición energética, por su aportación en kilovatios, por su proximidad, pero sobre todo porque serán pieza clave para la democratización de la energía.
Han destacado además que el Prat ha sido siempre una ciudad referente en sostenibilidad y en los últimos años han asentado las bases para que el Prat del futuro sea también un referente de la transición ecológica justa. En este sentido, han impulsado dos iniciativas pioneras: la Casa de la Energía, un espacio de asesoramiento energético, que ya ha ayudado a miles de hogares y comercios de la ciudad a abaratar sus facturas, y la energía del Prat, una comunidad energética que suma a agentes de toda la ciudad para compartir con hogares y comercios la energía limpia, local y económica que generan en los tejados de la ciudad.
Otro de los proyectos que impulsará El Prat de Llobregat es la instalación de una gran pérgola fotovoltaica para la comunidad energética local y para la empresa Aigües del Prat, que cuenta con una subvención de 1,5 millones de euros.
Objetivos para un desarrollo sostenible
La Oficina de Impulso de Comunidades Energéticas de la Diputación de Barcelona cuenta con un presupuesto de 1.365.000 euros, de los que 498.225 euros son subvencionados por el Instituto para la Diversificación y Ahorro de Energía (IDAE) del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. La ayuda económica forma parte de la primera convocatoria del programa de ayudas a oficinas de transformación comunitaria para la promoción y dinamización de comunidades energéticas, dentro del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia para la ejecución de los fondos Next Generation EU.
Esta acción de la Diputación de Barcelona responde a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) números 7 ‘Energía limpia y asequible’, 11 ‘Ciudades y comunidades sostenibles’ y 13 ‘Acción climática’. Los 17 ODS fueron proclamados por la Asamblea General de Naciones Unidas el 25 de septiembre de 2015 y forman parte de la agenda global para 2030. La Diputación de Barcelona asume su cumplimiento y despliega su acción de apoyo a los gobiernos locales de la provincia de acuerdo a estos ODS.