FCC Medio Ambiente y FCC Ámbito, que dentro del Grupo FCC prestan servicios medioambientales de reciclaje y gestión integral de residuos, están desarrollando un programa de instalación de tecnología fotovoltaica en todos sus complejos ambientales de reciclaje. Para disminuir la huella de carbono, llevan ya años promoviendo el autoconsumo de energía eléctrica renovable producida en las propias plantas mediante el aprovechamiento de energía a partir de residuos. En 2022, este autoconsumo supuso el 53% de la energía eléctrica consumida en las plantas.
Las plantas de tratamiento y reciclaje de residuos son las instalaciones con mayor consumo de energía eléctrica de la empresa y, por lo tanto, los centros de trabajo que más contribuyen a la huella de carbono de la organización en el alcance 2, que hace referencia a las emisiones indirectas de gases de efecto invernadero (GEI) asociadas a la generación de electricidad adquirida y consumida.
Con este proyecto, FCC Medio Ambiente y FCC Ámbito buscan impulsar el eje medioambiental de su Estrategia de Sostenibilidad 2050, donde se comprometen a seguir luchando contra el cambio climático y reducir para 2030 un 35% las emisiones de gases de efecto invernadero respecto a 2017, y a alcanzar la neutralidad en carbono en el año 2050.
Instalación de placas fotovoltaicas
La compañía FCC Medio Ambiente ha instalado en los dos últimos años 8.500 m2 de placas fotovoltaicas con una potencia de 1.693 kW en sus complejos ambientales de La Campiña (Loeches – Madrid) y Valsequillo (Antequera – Málaga), y a lo largo de 2023 y 2024 tiene previsto completar en nueve instalaciones de toda España el montaje de más de 39.000 m2 de paneles con una inversión superior a los 5 millones de euros y 8.000 kW de potencia que producirán cerca de 10.300 MWh de energía renovable cada año, y que supondrán una reducción de emisiones de 2.800 toneladas equivalentes de CO2 anuales.
Por su parte, FCC Ámbito está finalizando la instalación de más de 4.000 m2 de placas fotovoltaicas con una potencia de 863 kW en siete plantas de España, que producirán 1.200 MWh de energía renovable cada año y que suponen una reducción de emisiones de 324 toneladas equivalentes de CO2 anuales.
Además, está en estudio extender el programa a otras once instalaciones con 1.250 kW adicionales de potencia que producirán otros 1.600 MWh de energía renovable cada año.