La Generalitat de Cataluña está instalando un campo fotovoltaico de 900 paneles para el autoconsumo en el aparcamiento del muelle central del Puerto de la Ràpita, en Tarragona. Esta iniciativa, con la que se potencia la autosuficiencia energética de las instalaciones pesqueras, forma parte del plan de descarbonización de las actividades portuarias de la Generalitat. La actuación ha supuesto una inversión de 787.000 euros y se prevé que finalice a mediados de abril.
Las placas solares se están instalando en la cubierta de cinco marquesinas metálicas. Estas estructuras metálicas se han instalado en el aparcamiento del muelle central del Puerto de la Ràpita, situado junto a la lonja de pescado y cerca de la futura base náutica.
La urbanización en torno a la base náutica, la construcción del edificio y las marquesinas fotovoltaicas suponen una inversión de 2,3 millones de euros, obras ejecutadas entre 2022 y 2023.
Campo fotovoltaico de 900 placas con una potencia de 300 kW
La instalación fotovoltaica tiene por objetivo seguir avanzando en el grado de autosuficiencia energética de este puerto mediante la energía limpia, a fin de reducir la huella de carbono del puerto y de las actividades que se desarrollan.
En el aparcamiento del muelle central se instalará un campo fotovoltaico de 900 placas para el autoconsumo de las instalaciones pesqueras con una potencia de 300 kW y una energía generada de 546.320 kWh anuales. Con estos paneles se dejarán de emitir 195 toneladas de CO2 a la atmósfera.
Green Port
Éste es un avance para convertir el Puerto de la Rápita en un Green Port (puerto verde), ya que este puerto está vinculado a un espacio natural como es el Delta que forma parte de la Reserva de la Biosfera de las Terres de l’Ebre.
El Green Port debe desarrollar su actividad teniendo en cuenta el ámbito económico, el medioambiental y el social de forma sostenible y con el menor impacto en el medio, aportando medidas de mejora de control de la calidad del aire, el agua, el ruido y los residuos. El Puerto de la Ràpita, como Green Port, se enmarca en un contexto de emergencia climática y se alinea con el Plan de Puertos de Cataluña Horizonte 2030 que tiene como ejes primordiales la mitigación y la adaptación de los puertos al cambio climático.