Hasta el 20 de enero está abierta la adhesión a la comunidad energética local Toda Energía Huesca, impulsada por la Cámara de Comercio de Huesca con la colaboración de la Cámara Navarra y la Diputación Provincial de Huesca. Las pymes, familias y ayuntamientos se benefician de un ahorro directo del 25% como mínimo de la factura actual de electricidad.
Este proyecto altoaragonés tiene su origen en la iniciativa Toda Energía Navarra, un proyecto pionero impulsado por la Cámara de Comercio de Navarra, que ya fue aprobado en las anteriores convocatorias del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), y cuyo modelo se está replicando en otras provincias.
La constitución de Toda Energía Huesca presentará una solicitud conjunta provincial a la convocatoria de ayudas públicas CE Implementa del IDAE para impulsar proyectos piloto de actividades de comunidades energéticas. El plazo para presentar esta solicitud finaliza el 13 de febrero.
Placas fotovoltaicas en cubiertas cedidas por los ayuntamientos
Recientemente se ha celebrado una reunión informativa en la que han participado representantes de una veintena de ayuntamientos de la provincia. En el pasado mes de diciembre ya tuvo lugar otra reunión con participación de una docena de municipios. Varios de ellos, como Alcubierre, La Sotonera, Ayerbe o Santa Cruz de la Serós, ya han confirmado su intención de participar, mientras que otros están valorando su incorporación.
En una fase inicial, esta comunidad energética estará formada principalmente por los ayuntamientos y gradualmente se incorporarán familias y pymes. Es un modelo de autoconsumo compartido, donde se instalan placas fotovoltaicas en cubiertas cedidas por los ayuntamientos. Todos los ciudadanos y pymes que se encuentren dentro de un radio de dos kilómetros alrededor de la instalación podrán beneficiarse de la producción de esta energía renovable.
Una de las ventajas que ofrece este modelo a los ayuntamientos es que no tienen que realizar ninguna inversión previa. Solo tienen que ceder el uso de cubiertas de edificios para instalar placas fotovoltaicas que produzcan electricidad, de manera que vecinos y pymes participen de la comunidad energética para ver reducir su factura eléctrica entre un 25% y 30% gracias al autoconsumo, además del ahorro que también suponen las ofertas derivadas de la compra agrupada de energía por parte de la comunidad energética a las comercializadoras.