El Ayuntamiento de L’Espluga de Francolí, en Tarragona, ha llevado a cabo una instalación fotovoltaica en la escuela Martí Poch y en la guardería Carquinyolis, con el objetivo de reducir el consumo eléctrico proveniente de la red, así como mejorar la eficiencia energética y utilizar energías renovables.
Una vez realizados los trabajos previos, estos días se están instalando las placas en la cubierta de la escuela. La instalación estará formada por 52 módulos fotovoltaicos de 455 Wp de potencia unitaria, que pueden alcanzar los 23,66 kW de potencia instalada, conectados a dos inversores, uno por cada zona.
Los paneles solares instalados generarán la energía eléctrica necesaria para consumir en el mismo centro educativo y en caso de excedentes se inyectarán en la red. Se estima un ahorro económico acumulado en 10 años de 28.582,77 euros, además de un ahorro anual de 19,16 toneladas de CO2 al año.
Dos instalaciones fotovoltaicas en un año
Para llevar a cabo estas actuaciones, el Ayuntamiento ha contado con la colaboración del Consejo Comarcal de la Conca que se ha ocupado de la redacción del proyecto y de la dirección y coordinación de obra. El coste de la actuación es de 41.016, 39 euros y tiene una subvención de la Diputación de Tarragona de 19.374 euros, lo que supone el 47,23% del coste.
Estas iniciativas forman parte de las políticas medioambientales y energía sostenible que el gobierno municipal está desarrollando. Con este montaje, el Ayuntamiento habrá finalizado ya dos instalaciones fotovoltaicas en un año. Se espera que ambas instalaciones puedan estar conectadas a la red pública, antes de finalizar el año.