La Comisión Europea ha aprobado la constitución del consorcio europeo de infraestructuras de investigación EU-SOLARIS ERIC, que está liderado por España a través del Ministerio de Ciencia e Innovación. El nuevo consorcio tendrá su sede en la Plataforma Solar de Almería.
El objetivo de EU-SOLARIS ERIC, ahora reconocido formalmente como consorcio europeo, es la consolidación de la tecnología solar térmica de concentración como energía renovable en el marco de la transición energética global hacia un modelo descarbonizado.
Además de España, en EU-SOLARIS participan también Alemania, Chipre y Francia, como miembros de pleno derecho; así como Portugal como país observador, aunque está abierto a la participación futura de otros países europeos que tengan interés en la investigación y el desarrollo de las tecnologías de concentración solar.
Sede del consorcio
El nuevo consorcio tendrá su sede en la Plataforma Solar de Almería, centro que pertenece al Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (CIEMAT), dependiente del Ministerio de Ciencia e Innovación.
Con esta iniciativa, se refuerza este centro de referencia mundial en concentración solar en el que trabajan más de 120 personas, dentro del compromiso del Gobierno de España con impulsar la I+D+i en todos los territorios. Este centro y el CIEMAT dedican cada año más de 10 millones de euros de inversión a esta tecnología.
Objetivos de EU-SOLARIS
EU-SOLARIS nace de la extensa e intensa colaboración entre la comunidad científica europea, que opera instalaciones de tecnologías solares de concentración desde hace años con el objetivo de dar respuesta a sus necesidades e integrar las actividades de I+D y sus aplicaciones.
Los objetivos del recién creado consorcio europeo consisten en coordinar EU-SOLARIS como una única infraestructura distribuida, que abarcará las instalaciones europeas en I+D+i en este ámbito, ofrecer un único punto de entrada para la comunidad científica europea y reforzar la colaboración público-privada.
También se pretende mejorar las instalaciones de investigación existentes y proponer la construcción de nuevas si fuera necesario, así como coordinar la difusión abierta de datos y resultados experimentales y mantener a Europa a la vanguardia y liderazgo en el desarrollo de estas tecnologías.