Familias de alumnos de la escuela Enxaneta y el Institut Josefina Castellví, en Viladecans, participaron el jueves 6 de octubre en una sesión informativa para sumarse a una de las dos pruebas piloto de comunidades energéticas locales a través de las cuales el Ayuntamiento compartirá con la ciudadanía la energía solar generada en los tejados de equipamientos municipales.
El Ayuntamiento de Viladecans ofrece a 50 familias de estos dos centros educativos, que vivan a una distancia inferior a 500 metros, la posibilidad de disponer de 1 kW a un precio más económico que el de la energía de la red. Se calcula que cada familia se ahorraría alrededor de 150 euros al año.
Las placas fotovoltaicas para generar la energía ya están instaladas en el equipamiento desde su construcción en el año 2014, a diferencia de los otros 21 edificios municipales alrededor de los cuales el Ayuntamiento quiere impulsar comunidades energéticas antes de terminar 2023.
Comunidad energética del Mercado Municipal
Gracias al apoyo económico de los fondos FEDER de la Unión Europea, que sufraga la mitad de los casi 2 millones de euros del coste del proyecto, las obras se han puesto en marcha este verano en siete equipamientos educativos, cinco deportivos, cuatro culturales y tres administrativos, el depósito de vehículos y en el Mercado Municipal de la plaza de Europa.
Este equipamiento comercial es precisamente otro que forma parte de la prueba piloto de comunidades energéticas. Se están acabando ya de instalar 80 módulos fotovoltaicos que, antes de finalizar el año, permitirán proveer tanto el edificio del mercado y la oficina de atención ciudadana anexa como el consumo de una decena de puestos del propio mercado. El objetivo es que puedan rebajar en torno a un 30% el coste de la luz consumida por cada uno de los establecimientos.
Una potencia total de 940 kWp
Para cada nueva comunidad energética que vaya a ponerse en marcha, el Ayuntamiento abrirá una convocatoria previamente. Podrán aspirar aquellas personas que vivan a menos de 500 metros del equipamiento que genere la energía y la selección contará con criterios sociales de prioridad.
Estas personas no estarán obligadas a cambiar de compañía eléctrica (aunque es recomendable formar parte de la empresa energética local Vilawatt), ni tampoco tendrán que realizar ningún tipo de obra en sus hogares ni podrán verse afectadas por ningún problema de suministro, ya que se trata de un trámite simplemente administrativo.
La potencia instalada en el conjunto de esta veintena de equipamientos será de 940 kWp, el cual generará unos 1.200 MWh al año, el equivalente a todo lo que gastan unos 400 hogares de media. El Ayuntamiento ya ha solicitado otra subvención de los fondos Next Generation para ampliar la iniciativa con hasta 33 comunidades energéticas en los próximos años, sumando la instalación de placas en otros 11 equipamientos, entre ellos el cementerio municipal, y aumentar así en torno a un 60% la generación de energía verde actual.