El objetivo de la Asociación de la Industria Solar Térmica, ASIT, es contribuir a alcanzar los objetivos climáticos y de energía previstos para el año 2030. Su director general, Pascual Polo, explica las líneas estratégicas y acciones que desarrolla la entidad. En esta entrevista realiza un balance del sector, analiza sus expectativas y explica cómo la energía solar térmica puede contribuir a los objetivos de descarbonización, junto a los beneficios y la importancia de esta tecnología en la transición energética.
SOLARINFO: En el marco del Plan REPowerEU, la Comisión Europea ha publicado recientemente su estrategia de energía solar de la UE. ¿Qué valoración hacéis desde ASIT de esta estrategia y de los objetivos planteados? ¿Y en concreto para la energía solar térmica?
Pascual Polo: Desde ASIT hacemos una valoración muy positiva, aunque, según la nota prensa de la Comisión Europea, da la impresión de que sólo se hable de electrificación con fotovoltaica.
El sector de la energía solar térmica acoge con satisfacción el lanzamiento de una serie de iniciativas destinadas a abordar las crisis climáticas y de seguridad energética en curso: el Plan REPowerEU y la estrategia de energía solar de la UE. Estas iniciativas incluyen propuestas para acelerar drásticamente el despliegue de las energías renovables, tecnologías solares como la energía solar térmica y energía solar fotovoltaica. Marcan el camino para una transformación energética: el sector de la energía solar térmica se triplicará como mínimo para 2030, superando los 110 GWth de capacidad instalada.
El anuncio marca una nueva era para las tecnologías solares, tanto para la energía solar fotovoltaica como para la calefacción y refrigeración solar. Con el fin de reducir la dependencia de las importaciones de combustibles fósiles, la Comisión Europea presentó el plan REPowerEU, que incluye un mayor objetivo para las energías renovables (45%), una iniciativa pionera de tejados solares y medidas para la obtención de permisos. Estas iniciativas se complementan con propuestas más detalladas incluidas en la citada estrategia.
La estrategia de energía solar de la UE destaca la necesidad de triplicar el nivel actual de capacidad de generación de calor a partir de la energía solar térmica para 2030, lo que equivale a superar los 110 GWth de calor solar en Europa. Este objetivo representa una contribución esencial a la descarbonización de la demanda de calor de la UE, y tenemos la capacidad de fabricación en Europa para multiplicar la producción actual de solar térmica. Se reemplazarán las importaciones de combustibles fósiles con productos europeos y empleos europeos.
Un claro ejemplo de propuesta rompedora es la Solar Rooftop Initiative. La comisaria Kadri Simson anunció una obligación de techo solar para edificios públicos y comerciales a partir de 2026 y para edificios residenciales para 2029.
La energía solar térmica también aumentará el suministro de calor a los procesos industriales y las redes de calefacción urbana, lo que también se verá impulsado por otras medidas y el aumento de los precios del gas y la electricidad.
Ahora es esencial que el Parlamento Europeo y el Consejo Europeo adopten esta ambición renovada al revisar el objetivo vinculante para el calor renovable y el objetivo para la descarbonización de la industria en la Directiva de Energía Renovable.
SOLARINFO: En términos generales, ¿cómo puede contribuir la energía solar térmica a los objetivos de descarbonización de la UE y de España? ¿Qué importancia debe adquirir esta energía en la transición energética?
Pascual Polo: La lucha contra el cambio climático es una de las máximas prioridades en todas las agendas políticas de Europa. Si somos realistas, los retos que hay que afrontar en el muy corto plazo son abrumadores, por lo que vamos a tener que utilizar una combinación de soluciones si queremos cumplir con los objetivos del 2030. Así pues, la solar térmica está llamada a tener un papel importante, sobre todo para cubrir la demanda térmica, la cual representa más del 50% de la demanda total. Si el 51% del consumo energético es para cubrir la demanda de calor, ¿por qué electrificar el 100% de la oferta?
Ya estamos viendo como empiezan a aparecer impuestos para cubrir las externalidades de las emisiones, así pues, la solar térmica es una tecnología imbatible en términos de huella de CO2, tanto por su ciclo de vida, pues los captadores solares se fabrican en España, como por la energía ahorrada en su periodo de utilización de más de 25 años con rendimientos entre el 80% y el 60%.
A todo esto, en los últimos meses estamos viendo una escalada sin precedentes en el precio de los combustibles, por lo que, en términos puramente económicos, la solar térmica va a ser una de las soluciones más racionales para cubrir las demandas térmicas tanto de nuestros hogares como de ciertas industrias con necesidades de calor y del sector terciario.
SOLARINFO: Según vuestras cifras, a lo largo de 2021 se han instalado en España un total de 115,8 MWth solares térmicos, superando la cifra de 3,4 GWth en el acumulado de potencia instalada. ¿Cuál es la situación actual del mercado de la energía solar térmica en nuestro país? ¿Qué expectativas de crecimiento prevéis para 2022 y 2023? ¿Y qué principales retos y desafíos es necesario abordar?
Pascual Polo: En 2022 se espera un gran crecimiento del mercado solar térmico, gracias al crecimiento del mercado de la nueva construcción de edificios y a las importantes ayudas a las renovables térmicas del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, ayudas que ya están gestionando las CCAA y que tendrán fondos hasta finales de 2023. Estas ayudas pueden alcanzar subvenciones a fondo perdido de más del 70% en algunas instalaciones solares térmicas. Además de las líneas de ayudas al sector residencial, también se han publicado convocatorias de ayudas para renovables térmicas en el sector terciario e industrial.
Esperamos un crecimiento en torno al 10% respecto a 2021, alcanzando los 5 millones de metros cuadrados instalados acumulados. Todo parece indicar una recuperación positiva del sector, muy relacionado con el crecimiento del sector de la construcción de viviendas residenciales, en las que se aplica el Código Técnico de la Edificación.
Nos encontramos por tanto ante un mercado con grandes expectativas de crecimiento, en búsqueda de nuevos nichos de mercado como el sector industrial y las redes de calor, más allá del sector residencial y el sector terciario.
SOLARINFO: ¿Cuáles son los puntos fuertes de la energía solar térmica en comparación con otras tecnologías renovables? Se espera que las soluciones de calefacción y ACS renovables desempeñen un papel importante para lograr un escenario descarbonizado en 2050. ¿Qué potencial, ventajas y beneficios puede aportar la tecnología solar térmica en las viviendas? ¿Y en otros sectores de la economía, como la industria o las redes de calor?
Pascual Polo: Con rendimientos superiores al 70%, los captadores solares térmicos son el método más sostenible y eficiente para generar más energía (calor) en el menor espacio, con contaminación cero e impacto nulo. Los fabricantes están constantemente mejorando su eficiencia e innovando en sus diseños, haciéndolos más ligeros, mejorando su integración, y, si la aplicación lo requiere, concentrando su capacidad de captación para conseguir mayores temperaturas en menores espacios.
La solar térmica va a tener un papel crucial en la nueva edificación. El concepto de edificio de consumo casi cero implica proyectar estos teniendo en cuenta aspectos de ahorro energético, junto con la integración de energías renovables. Respecto al primer aspecto, la reducción de consumo del propio edificio se puede lograr teniendo en cuenta aspectos arquitectónicos (aislamientos, orientación del edificio, etc.), cosa que implicaría reducciones de consumos tanto en climatización como en iluminación. Sin embargo, no se pueden llevar a cabo acciones efectivas para conseguir la reducción de los consumos de agua caliente sanitaria, esto significa que el consumo energético del edificio para la generación de ACS va a pasar a ser uno de los mayores, sino el mayor, en los edificios del futuro.
La energía requerida para el agua caliente sanitaria en los edificios de consumo casi cero significa un porcentaje muy elevado del consumo total del edificio, básicamente porque no es posible llevar a cabo acciones que hagan disminuir el número de litros de agua que los usuarios de estos edificios requieren en su vida diaria.
La disminución del consumo energético pasa por utilizar equipos de producción y acumulación más eficientes, sin embargo, los ahorros energéticos que se derivan de su uso no son suficientes para obtener una disminución efectiva que haga que su influencia en el total de energía consumida por el edificio deje de ser tan elevada. Así pues, se hace necesario el uso de energías renovables para paliar este efecto, y en este sentido el uso de la energía solar térmica se muestra como la energía renovable más efectiva para la generación de agua caliente sanitaria.
La inclusión de la energía solar térmica va a resultar fundamental para conseguir que realmente los consumos energéticos sean casi nulos, dado que se trata de una energía gratuita e inagotable, siendo, además, España un país privilegiado en este aspecto por la elevada radiación solar que recibe. Se trata de una tecnología más que madura, en la que existe una gran experiencia tanto por parte de los proyectistas como por parte de los instaladores, con fabricantes que han desarrollado equipos que hacen las instalaciones cada vez más fiables.
La energía solar térmica, junto con todas las renovables térmicas, es imprescindible para el cumplimiento de los objetivos marcados por la Unión Europea, y nos sentimos totalmente identificados en ellos. Las renovables térmicas tenemos un papel fundamental en el Paquete de Invierno, que incluye, además de la Directiva de energías renovables, directivas sobre la eficiencia energética y el rendimiento energético de los edificios.
Las renovables térmicas han estado infravaloradas respecto a su potencial dentro del discurso político y social, un discurso que pretende electrificar todo el consumo y la generación, pero no debemos olvidar que el 50% de la energía en Europa se utiliza para calefacción y refrigeración de edificios, la mayoría de los cuales proceden de combustibles fósiles, y para cambiar dicho escenario será imprescindible contar con las renovables térmicas.
Respecto a las ventajas y beneficios que puede aportar la tecnología solar térmica en otros sectores de la economía, como la industria, casi toda la demanda de calor en procesos industriales requiere calor en los rangos de temperatura que puede proporcionar un sistema solar térmico, ya que la mayoría de las aplicaciones se encuentran en los rangos de temperatura baja a media.
La mayoría de los procesos industriales requieren tanto el calentamiento de una corriente de fluido (por ejemplo, corrientes de aire caliente, agua caliente, reposición de agua) como el calentamiento de algún depósito (por ejemplo, hornos, baños líquidos). Los sistemas de calefacción existentes para el proceso de calor industrial se basan en vapor o agua caliente de una caldera, que utiliza principalmente combustibles fósiles como petróleo, gas y carbón o electricidad generada por diferentes fuentes.
Los procesos industriales pueden utilizar energía solar térmica de baja temperatura para ebullición, pasteurización, esterilización, limpieza, secado, lavado, blanqueamiento, vaporizado, decapado, cocción, lixiviación, etc. El mayor potencial se observa en la industria de alimentos y bebidas, pero también en sectores como el cerámico, químico, textil, papel, metal, corcho o la minería.
Los captadores solares térmicos disponibles comercialmente son adecuados en sistemas solares térmicos capaces de generar calor a baja temperatura hasta 150 °C, por tanto, existe potencialmente una amplia gama de aplicaciones solares térmicas en industria.
Ya existen aplicaciones bien conocidas de calor solar térmico en cervecerías, minería, agricultura (secado de cultivos) o en el sector textil. En 2015, alrededor de 150 sistemas solares térmicos en industria a gran escala están documentados en todo el mundo, desde 0,35 MWth (500 m2) hasta 27,5 MWth (39.300 m2). Sin embargo, existe un gran potencial para desarrollos de mercado basados en innovaciones, ya que el 28% de la demanda total de energía en los países de la UE27 se origina en el sector industrial y la mayoría de esta demanda de calor se encuentra en un rango de temperatura inferior a 250 °C.
Asimismo, respecto a las ventajas y beneficios que puede aportar la tecnología solar térmica en las redes de calor, se trata una tecnología madura que está ya disponible. Su eficacia para descarbonizar la calefacción y el ACS está demostrada desde hace décadas, además en países nórdicos donde la demanda es mucho más alta y la irradiación solar mucho menor. En Dinamarca, desde 1988, ya hay 1 GW de solar térmico instalado solo para redes de calor. Pero en España aún no se ven proyectos de gran escala.
La solar térmica puede ofrecer calor a un coste de 30 y 50 €/MWh, según tamaño de la instalación solar. El criterio de diseño en las redes de calor puede alcanzar el 100% de fracción solar en verano (ACS + pérdidas térmicas de red) y el objetivo es apagar la caldera de biomasa en verano para ahorrar el combustible y reducir el funcionamiento a carga parcial.
Los beneficios de los sistemas solares térmicos, en particular para sistemas tan grandes, cubren aspectos ambientales, de política energética y económicos.
Los beneficios ambientales se relacionan con la capacidad de reducir las emisiones nocivas. La reducción de las emisiones de CO2 depende de la cantidad de combustibles fósiles reemplazados directa o indirectamente, cuando el sistema reemplaza el uso de electricidad a base de carbono utilizada para calentar agua. Un sistema de 1,4 MWth (2.000 m2) podría generar el equivalente a 1,1 GWhth/año, un ahorro de alrededor de 175 kg de CO2.
Los beneficios políticos y económicos están asociados con los ahorros potenciales en costos de energía y la posibilidad de mejorar la seguridad energética al reducir las importaciones de energía, mientras se crean empleos locales relacionados con la fabricación, comercialización, instalación y mantenimiento de sistemas solares térmicos. En un alto porcentajes locales.
Con respecto a los costos de energía y los ahorros potenciales, hay tres aspectos principales a considerar que tienen un mayor impacto en los costos comparables de la energía producida por un sistema solar térmico. Estos son el costo inicial del sistema, la vida útil del sistema y el rendimiento del sistema.
SOLARINFO: Como foro de encuentro y asociación del sector de la energía solar térmica, ¿cuáles son las funciones principales de ASIT Solar Térmica? ¿Qué acciones estáis desarrollando en la actualidad? ¿En qué consistirán vuestras líneas estratégicas y objetivos a corto y medio plazo para mejorar la situación actual del sector?
Pascual Polo: La principal función de ASIT es contribuir activamente a la realización del potencial de la energía solar térmica, y para ello ASIT persigue los objetivos estratégicos de ser un interlocutor reconocido por las instituciones con el objetivo de aconsejar y poner en práctica programas de apoyo al sector; apoyar a sus miembros con las instituciones, programas y políticas que conciernan al sector; y desarrollar y apoyar instrumentos que aumenten la confianza de consumidor, la calidad de producto.
Nuestras líneas estratégicas a corto y medio plazo pasan por fortalecer la solar térmica en el sector residencial y en la rehabilitación de edificios, como la tecnología más eficiente y que ocupa menor espacio para calentar agua, y como la tecnología que puede hibridarse fácilmente con la bomba de calor, consiguiendo avanzar hacia los edificios de consumo casi nulo.
Asimismo, estamos trabajando por la apertura del gran mercado de las renovables térmicas en sectores industriales con grandes demandas de calor. Actualmente estamos finalizando una colaboración con el IDAE y el ICCL para la elaboración de una Guía de energía solar térmica en procesos industriales, con el objetivo de informar a los diferentes sectores productivos de las posibilidades de aprovechar la solar térmica en sus procesos con necesidades de calor y las ventajas económicas, energéticas y de ahorro de emisiones de CO2, a través de casos de éxito en varios sectores industriales.
En nuestro próximo Congreso de la Energía Solar Térmica que celebraremos en la Feria Genera 2022, presentaremos dicha Guía de Solar Térmica en Procesos Industriales, el 15 de junio en la sala N114 (entrada Norte de Ifema).
También hemos iniciado la elaboración de un Manual de Rehabilitación de Instalaciones Solares con el IDAE, un manual práctico dirigido a las empresas de servicios energéticos e instaladoras/mantenedoras, en el que se recoja el procedimiento de actuación del técnico para revisar el proyecto/diseño, para que disponga de las referencias de todos los fallos posibles, aunque destacando los más habituales, y definiendo las posibles vías de solución para que el profesional seleccione la rehabilitación más adecuada. Incluso incorporando análisis de viabilidad económica de la rehabilitación, así como rentabilidad de la actuación para los usuarios y las empresas. Se incorporará como Anexo a la Guía Técnica de la solar térmica, IDAE-ASIT.
Es obvio que un cambio de modelo energético es posible y necesario, pero para ello, más allá de la capacidad tecnológica más que demostrada de la solar térmica y su potencial, hace falta voluntad política, estando más que demostrado que las inversiones en renovables son positivas por su retorno económico y social.
Necesitamos que la administración pública sea responsable, coherente y que vele por el cumplimiento de los objetivos en materia de energías renovables, en línea con los acuerdos alcanzados en la Unión Europea y el Parlamento Europeo. La Comisión propone aumentar el objetivo principal para 2030 en materia de energías renovables del 40% al 45% en el marco del paquete de medidas ‘Objetivo 55’.
SOLARINFO: A través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, con los fondos de recuperación europeos Next Generation EU, se han puesto en marcha varios programas de ayudas para el autoconsumo, el almacenamiento y las instalaciones térmicas con renovables, que además acaban de reforzarse. ¿Qué expectativas creéis que se presentan para el sector solar térmico con estas ayudas? Desde vuestro punto de vista, ¿qué otras acciones y desarrollos normativos deben llevarse a cabo para impulsar el despliegue de la energía solar térmica en España?
Pascual Polo: En 2022 y 2023 hay grandes expectativas de crecimiento del mercado solar térmico, gracias a las importantes ayudas a las renovables térmicas del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, ayudas que ya están gestionando las CCAA y que tendrán fondos hasta finales de 2023. A diferencia de otros programas de ayudas anteriores, las convocatorias estarán abiertas durante este año y el siguiente, lo cual facilita la adaptación de los instaladores e ingenierías para comercializar estas ayudas, que pueden alcanzar subvenciones a fondo perdido de más del 70% en algunas instalaciones solares térmicas.
Las líneas de ayudas están disponibles para el sector residencial y también se han publicado convocatorias de ayudas para renovables térmicas en el sector terciario e industrial.
Respecto a desarrollos normativos para el despliegue de la solar térmica en España, se debería adaptar el Código Técnico de la Edificación a las posibilidades de hibridación de tecnologías, y con ello ser más exigente en cuanto al aporte de energías renovables para la climatización de las viviendas.
Según el CTE HE4 se debe cubrir hasta un 70% el consumo de ACS con energías renovables, sin tener en cuenta la posible hibridación de sistemas de energías renovables. La aparición de nuevas tecnologías, así como el avance de la hibridación entre ellas, hace que sea relativamente sencillo generar el ACS de los edificios usando el 100% de energías renovables: Bomba de calor + Solar Térmica. La combinación de estas tecnologías permite el uso de más del 90% de renovables en la generación de ACS. Además, no implica un coste mucho más elevado dado que las bombas de calor ya permiten la combinación de ambas tecnologías. Cabe destacar que no implicaría un incremento de coste en el edificio comparado con lo que se indicaba en el anterior CTE HE4, donde también era necesario el empleo de solar térmica más un sistema auxiliar.
Por último, cabe destacar que existen estudios energéticos en edificios reales donde se aprecia un cambio sustancial en el consumo energético de este por el hecho de hibridar tecnologías para generación de ACS.
Y en el terreno de los grandes consumos de calor en la industria, se debería avanzar en su descarbonización, implementando medidas para promocionar las renovables térmicas en la industria, como estipular una cuota de energías renovables térmicas en determinadas industrias con necesidades de calor, ya sea junto con incentivos para su implementación o a través de empresas de servicios energéticos que ofrecieran el calor renovable a dichos industriales.