La Diputación de Álava apuesta por placas fotovoltaicas para reducir el consumo energético de las EDAR

La Diputación Foral de Álava ha concluido la instalación de las placas solares fotovoltaicas en las EDAR de Ribabellosa y Bernedo para destinar la energía obtenida al consumo de cada infraestructura hidráulica. La instalación fotovoltaica ejecutada está compuesta por 72 módulos fotovoltaicos de 455 Wp con una potencia pico de 32,76 kWp.

La institución foral ha invertido 72.570,75 euros en la instalación de las placas solares fotovoltaicas en las estaciones depuradoras de aguas residuales de Ribabellosa y Bernedo, que entrarán en funcionamiento a lo largo de las próximas semanas.

Esta intervención forma parte de la estrategia del departamento de Medio Ambiente para impulsar la implantación de energías sostenibles en edificios y equipamientos de titularidad pública.

EDAR de Ribabellosa

La EDAR de Ribabellosa está dimensionada para tratar la carga contaminante de 3.293 habitantes equivalentes, donde la estimación de consumo medio anual es de aproximadamente 138.000 kWh, lo que supone un consumo medio mensual de 11.500 kWh y diario de 380 kWh.

Se trata de una instalación de autoconsumo, sin vertido de excedentes a red eléctrica, al alimentarse desde la instalación eléctrica de alta tensión y ser la potencia instalada inferior al consumo eléctrico demandado.

El sistema dispone de comunicación para poder visualizar parámetros de generación y eventos monitorizados.

Teniendo en cuenta la potencia instalada, situación de la instalación, orientaciones, ángulos de incidencia y radiación solar, la producción anual estimada es de 42.035 kWh anuales, habiéndose tenido en cuenta el global de las pérdidas de la instalación, lo que puede suponer una reducción de consumo, en lo que se refiere al término de kWh anuales del 30%. La reducción de CO2 es de 13,91 toneladas al año.

EDAR de Bernedo

La infraestructura de Bernedo está compuesta de 14 módulos fotovoltaicos de 455 Wp, orientados al este, y otros 14 módulos 455 Wp, orientados al oeste, con una potencia pico de 12,74 kWp, y colocados sobre la cubierta del edificio de control.

El consumo medio anual es de aproximadamente 62.500 kWh, lo que supone un consumo medio mensual de 5.200 kWh y diario de 170 kWh. La EDAR está dimensionada para tratar la carga contaminante de 1.500 habitantes equivalentes.

Clasificada como de autoconsumo, con compensación de excedentes a la red eléctrica, la energía generada se almacena en un sistema modular de cinco baterías de 13,80 kWh. El sistema dispone de comunicación para poder visualizar parámetros de generación y eventos monitorizados. La producción anual estimada es de 14.858 kWh anuales, lo que puede suponer una reducción de consumo del 24%.

 
 
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