La Dirección General de Energía y Cambio Climático del Gobierno de Islas Baleares y el Instituto Balear de la Energía (IBE) han presentado este martes 5 de abril a los vecinos de Ciutadella (Menorca) la convocatoria de adhesión al primer proyecto de autoconsumo compartido del municipio y de la isla de Menorca.
El proyecto de energía fotovoltaica, de 40 kW de potencia, se instalará sobre la cubierta del centro educativo Virgen del Toro, en una superficie de 600 m2. Se trata de uno de los proyectos de autoconsumo compartido que impulsa el IBE y ofrecerá electricidad limpia y a precio de coste en diferentes espacios municipales, entre ellos el propio colegio, entre 16 y 32 familias y hasta seis pymes, ubicadas en un radio de 500 metros de esta instalación.
Proyecto financiado por el turismo sostenible
La inversión del IBE en el proyecto de Ciutadella es de 94.300 euros. La instalación fotovoltaica producirá anualmente 90.000 kWh, dejando de emitir 67.000 kg de CO2 al año. La inversión necesaria para llevar a cabo esta comunidad energética es de 43.032,32 euros más IVA, esto es un total de 52.069,11 euros, importe que será financiado con cargo al impuesto de turismo sostenible.
El procedimiento público de inscripción estará abierto entre el 10 de abril y el 15 de mayo y permitirá seleccionar los particulares y empresas que podrán consumir la electricidad de la instalación fotovoltaica por un período de un año prorrogable hasta cuatro, momento en el que se abriría una nueva convocatoria.
Además, se trabajará con el Área de Servicios Sociales del Ayuntamiento para que familias de colectivos vulnerables puedan beneficiarse de las ventajas sociales de este proyecto.
El autoconsumo, un derecho de los ciudadanos
Durante la presentación de la convocatoria, el director general de Energía y Cambio Climático, Pep Malagrava, se refirió al conjunto de medidas aprobadas el pasado miércoles 30 de marzo para agilizar todos los trámites y el acceso al autoconsumo. De hecho, desde hace una semana, los ciudadanos de las Islas Baleares disponen de un nuevo derecho, el derecho al autoconsumo, que les permitirá acceder y producir energía limpia a través de esta tecnología.
Como en el resto de proyectos presentados en otros municipios, en el momento de adhesión a la comunidad energética tendrán prioridad las personas que se encuentren en una situación de vulnerabilidad.
Mediante una campaña para animar a ayuntamientos y consejos a ceder espacios al IBE para proyectos de este tipo, el Gobierno balear quiere expandir este programa de comunidades energéticas en los próximos años y llegar al máximo de municipios posibles.